Cuando yo comencé a estudiar, el español para mi no significaba nada, ya que en esos años no comprendía la importancia de esta materia, al iniciar mis estudios no me gustaba el español pues tenía mala letra y muchos errores de ortografía, mis primeros profesores no los recuerdo muy bien pero lo que si sabía era pronunciar muy bien el alfabeto, me tomo mucho tiempo diferenciar la letra d con la letra b. por lo cual era otro factor que no favorecía e gusto por el español, luego fueron pasando los años y adquirí mas practica en esta materia, luego me fue gustando saber de literatura, sobre todo la literatura fantástica. Este gusto se despertó gracias a profesora en séptimo grado, la cual solo nos hablaba de literatura y me pareció muy interesante, para mi opinión hay sido la mejor profesora de esta materia hasta ahora, luego hubo un concurso de cuentos en el cual me inscribí, le pedí ayuda en corrección de errores y redacción de este. Luego de un año cambie de profesora y tuve un profesor, el cual solo nos hablaba sobre obras teatrales, a este profesor también le pedí ayuda para escribir mi cuento, con el aprendí la redacción de monólogos y también un poco de lectura, con el leíamos “María”, una obra de Jorge Isaac y “El Diario de Ana Frank”, estas dos obras no llamaron mi atención pues mis gustos era los cuentos y novelas fantásticas o tal vez un poco de comedia. Pasó el año octavo y ahora estoy cursando el grado noveno con una profesora con la cual no he tenido la oportunidad de conocerla muy bien y por tercera vez he pedido que me ayuden en el cuento y aquí termina mi historia.
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